Está casada, sin hijos,
es espiritualista cristiana y en su familia nadie tiene el don de
poder hablar con espíritus. Ella es Anne Germain, la médium de 'Más allá de la
vida'.
"Yo nací con esta habilidad, con
este regalo de poder hablar con los muertos", explica la médium Anne Germain.
Unas palabras impactantes que no dejan a nadie indiferente, ni siquiera a los
escépticos.
Este don le llegó cuando contaba con
tan solo dos años y medio de edad, y "no sé vivir sin él", confiesa.
El primer mensaje se lo pasó a su madre de parte de su tío que murió durante la Segunda Guerra Mundial
y la segunda persona con la que contactó fue también muy cercana, su tía. En
ese momento, Anne Germain contaba con tan sólo ocho años y "la
vi más o menos a los 10 minutos de haber fallecido".
La capacidad de ver muertos y hablar con
ellos según la médium del programa de Jordi Gonzalez 'Más allá de la vida'
parece ser que en cierta medida la tiene todo el mundo, "simplemente la
diferencia es que en mí o en otra gente como yo, el porcentaje es mayor.
Pero creo que todos nosotros tenemos esa habilidad", comenta.
Su día a día no es menos complicado que
en el programa, "he de reconocer que cuando estoy haciendo la compra veo a
espíritus que quieren contactar con gente que está en la tierra", cuenta.
La pregunta que más interés puede
suscitar entre todos los seguidores del programa es, cómo se le manifiestan los
muertos: "Ellos siempre me hablan en su idioma y yo siempre entiendo lo
que dicen. Y si se quieren manifestar de forma física, lo hacen. Y si de
repente se quieren manifestar como una luz o de una manera quizás diferente,
ellos son los que deciden de qué manera", explica.
En cada sesión en la que participa, Anne
Germain explica que no ve a la persona